Pueblos

La Savina

Lugar de conexión para todos los residentes y visitantes

En el extremo occidental de la isla encontramos el puerto de La Savina, un lugar de paso obligado para todos los visitantes pues aquí es donde atracan todos los barcos procedentes de Eivissa.Este puerto se extiende desde el Estany des Peix y termina en sa Sequi.

Este pequeño puerto fue creado a finales del siglo XIX y principios del XX, con el objetivo de ofrecer a lo propietarios de las embarcaciones amarradas en el Estany des Peix un lugar alternativo donde resguardarse. Con los años se convirtió en un punto clave para exportar la sal que se recolectaba y se fueron desarrollando toda clase de infraestructuras para favorecer su transporte. Hoy en día todas estas instalaciones se han reconvertido para enfocarse al turismo y el puerto es el principal vía de abastecimiento para toda la isla.

Al tratarse del lugar de conexión para todos los residentes y visitantes, en verano es muy habitual toparse con un constante ajetreo de personas que van y vienen. Aquí atracan varias compañías navieras que cuentan con diversos trayectos para mantener la isla conectada a lo largo de todo el dia. Excepcionalmente, el mal tiempo puede interrumpir estos servicios, sobre todo en los meses de invierno.

Una vez se desembarca en este encantador puerto encontramos su renovada estación marítima donde hacer las reservas de billetes o tomar algún tentempié. Junto a ella se despliega un amplio puerto deportivo donde también se pueden amarrar barcas particulares o alquilarlas para disfrutar de un día de navegación en las aguas de Formentera. Si seguimos el paseo que bordea el puerto vamos encontrando distintos establecimientos que desde primera hora del día ofrecen vehículos de toda clase para poder ser alquilados. También hay diversos bares y restaurantes donde tomar algo mientras se disfruta del ambiente del puerto. Tras todos estos edificios, encontramos los diques que protegen La Savina de los temporales marítimos.

Si continuamos paseando por el puerto seguiremos encontrando más establecimientos de alquiler de vehículos, restaurantes, hoteles… pero el detalle con más encanto de esta zona es su pequeño mercadillo de estilo hippie que abre sus puertas cada tarde.

La estampa de este puerto se completa con los restos del antiguo dique que ocupan el extremo sureste del puerto y desde donde comienza una bella ruta para bicicletas hacia el Parque Natural. Y como colofón final, nada mejor que contemplar la puesta de sol en el lado de poniente del puerto, la mejor forma de despedirse de la isla antes de partir.

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