Formentera, amiga de la infancia
Formentera es el destino estrella para disfrutar de unas inolvidables vacaciones con sus hijos. Aguas turquesas, tranquilas y templadas, y un entorno perfectamente conservado, constituyen un auténtico paraíso para toda la familia.
Una típica construcción isleña, una casita rural en el campo, o un alojamiento en uno de los diferentes núcleos urbanos, a no más de 20 minutos en coche del punto más alejado de la isla, permiten poder disfrutar de todo tipo de actividades por tierra y por mar.
Por tierra, tranquilos paseos en bicicleta por las distintas rutas cicloturísticas, a pie por los innumerables caminos rurales, y visitas al amplio patrimonio cultural repartido por toda la isla, te permitirán disfrutar de la naturaleza en estado puro.
Por mar, una amplia oferta de actividades acuáticas, como el windsurf, paddle surf, kayac, submarinismo, o el simple relax en las idílicas playas de arena blanca y aguas transparentes, harán de la estancia una vivencia única.
El buen clima de Formentera durante todo el año permite disfrutar de cada rincón y bañarse en el mar en cualquier época. La isla en primavera ofrece su mejor aspecto para disfrutar de su magnífica luz e increíble color. Lejos del bullicio estival, una puesta de sol o una simple mirada al cielo y al mar se convierten en un espectáculo único que, por sí mismo, ya justifica una visita a la isla.